Aunque tarde cojo el relevo de Juana la loca.
¿Recuerdas un perfume? Lo primero me vienen olores: el café recién hecho, el olor de comida deliciosa que viene de la cocina de mi madre, la tierra mojada tras la tormenta de verano, las lechugas y los tomates de la huerta. A casi todos esos olores les acompaña un sabor que añoro. Está el recuerdo de olores desagradables que recuerdo con cariño (los “menudicos“ mientras son limpiados, alientos queridos que acaban de despertar, ... No sigo, que todavía tengo un placer infantil algo escatológico. El “Vicks VapoRub" no sé donde clasificarlo. Tampoco el olor del esmalte de uñas de mi madre.
Perfumes que me acompañan desde la infancia… ¿Sirven los polvos de talco? ¡Los productos “Avon” que compraban nuestras madres en esas reuniones! ¿La “Nivea”? Sí. La colonia "Nenuco" o algo parecido también estaba por ahí.
Leo en el diccionario. "Perfume": sustancia que se utiliza para dar buen olor. Entonces tengo que hacer cierto esfuerzo para echar mano de alguno de los botecicos que tengo al lado del lavabo. Es que me encanta oler simplemente a "persona limpita", a jabón. Y confieso que me voy encaprichando con geles y cremas corporales de suave aroma.
Entre los frascos de cristal tengo colonias de frutas (limón verde que traje de Menton y mandarina). Y mis preferidas son "Eau de Rochas", "Dolce & Gabbana" (era la colonia de mi madre y yo me envuelvo a veces con ella y me siento acompañada), y un aceite que olí a una amiga y ésta a su vez me lo regaló. Este pequeño bote es mi pequeña joyita olorosa quizás por ser desconocido y de dudosa procedencia. En letras minúsculas y en inglés el oloroso y pequeño "White Musk" reza así:
"Siente el regocijo del almizcle blanco. La tormenta en un frasco de perfume. Suaves notas de polvo de almizcle y delicados florales se mezclan suavemente con cálida vainilla para cautivar los sentidos dejandonos disfrutar de la tormenta del lujo."
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